Autor: JOSÉ TOMÁS TENORIO LABRA
Rodeado de amenazas, Japón se rearma después del pacifismo heredado tras los bombardeos
Rodeado de amenazas, Japón se rearma después del pacifismo heredado tras los bombardeos Con el gran trauma aún presente por los bombardeos de Hiroshima y Nagasaki hace 80 años, la conmemoración hoy de los ataques llega con el siempre presente mensaje de rechazo a estas armas y su devastación, pero también enmarcada por la transformación militar que vive Japón en un escenario de amenazas cada vez mayores.
Después de las décadas de pacifismo que heredó de la posguerra, la nación pasa por un notorio rearme alentado por retóricas agresivas de vecinos como China, Corea del Norte y Rusia, y una política exterior de su aliado EE.UU. que genera incertidumbre.
En lo que fue descrito como el “panorama de seguridad más severo y complejo en la era de la posguerra” para Japón, la publicación a mediados de julio de su versión anual del Libro Blanco de Defensa remarcó los recientes esfuerzos del país para adaptarse a este escenario. “Estamos reforzando fundamentalmente las capacidades de defensa de Japón (... ) para proteger las vidas y el estilo de vida pacífico de los japoneses”, señaló el documento. Solo unas semanas antes, Japón había dado nuevas muestras de estos esfuerzos al probar por primera vez el lanzamiento de un misil desde su territorio, visto por analistas como un mensaje disuasorio hacia China. La acción vino precedida por reportes que apuntan a planes del gobierno de desplegar misiles en el sur del país, en lo que autoridades describieron como parte de las “capacidades de contraataque” de Japón.
Durante los últimos años JaSon tres países cercanos a Japón, y los tres con armas nucleares”. Parte de la nueva mentalidad japonesa en torno al tema de su defensa quedó también evidenciada en las recientes elecciones a la Cámara Alta, en la que los principales partidos del país, tanto del oficialismo como de la oposición, apuntaron a la necesidad de aumentar drásticamente las capacidades defensivas del país. Ya a inicios de año, el gobierno de Shigeru Ishiba dio pasos en esa dirección al destinar un presupuesto récord de 8,7 billones de yenes (US$ 55.300 millones) para la defensa durante 2025.
EE.UU., una pieza clave, pero ahora incierta La renovación militar de Japón responde también a los intereses por mantener cerca a su principal aliado durante décadas, EE.UU., al que el gobierno reconoce como un “pilar fundamental para la seguridad” nacional y para la estabilidad en la región.
Pese a su estrecha colaboración, con Donald Trump en la presidencia el compromiso de Washington parece mostrar algunas grietas, luego de que el republicano criticara que Japón se apoya excesivamente en la presencia militar estadounidense en bases que tiene por el territorio nipón.
Algunas de esas inquietudes fueron abordadas por ambos países durante las recientes negociaciones para alcanzar un pacto comercial con EE.UU. como parte de las presiones de Washington a países de todo el mundo por medio de aranceles.
El acuerdo, además de convenir temas impositivos, incluyó el compromiso de Tokio de aumentar su compra de armas a Washington, una decisión que apuntó a reducir tensiones entre los dos países y estrechar aún más su alianza estratégica. “En un contexto regional altamente tenso, Japón querrá demostrar a EE.UU. que es un aliado no solamente confiable, sino que también capacitado y debidamente preparado. Reforzar los lazos de defensa con EE.UU. también es una razón para que Japón ponga aún más atención a reforzar su seguridad”, explica Murata.
ALLICNAMNAHTANOJ. ....................................................................................................................................... PAPA LEÓN XIV EN UN MENSAJE DIRIGIDO AL OBISPO DE HIROSHIMA, ALEXIS MITSURU SHIRAHAMA. pón ha impulsado una suerte de evolución del pacifismo, que está consagrado en su Constitución desde el fin de la Segunda Guerra Mundial que renuncia expresamente “para siempre” a la guerra, hacia una forma más proactiva para no quedar expuesto a amenazas en la región.
Cambios en los últimos años Ya en 2015 se veían aspectos de este cambio, cuando el gobierno de Shinzo Abe (20062007,2012-2020) aprobó una ley que permitía por primera vez desde la posguerra el envío de tropas de las Fuerzas de Autodefensa de Japón para combatir en el extranjero.
Pero un punto clave fue en 2022, cuando el Ejecutivo de Fumio Kishida (2021-2024) aprobó nuevas directrices de defensa que por primera vez permitían la adquisición de capacidades de contraataque para golpear posiciones enemigas en caso de una agresión, junto al compromiso de un aumento del gasto de defensa al 2% del PIB para 2027.
Así, Japón busca reaccionar a lo que en los últimos años las autoridades señalan como un “desafío estratégico sin precedentes” por el auge del poderío militar de China y sus reclamaciones territoriales en la región, sumado a las crecientes tensiones en torno a Taiwán, que amenazan con desestabilizar la zona.
“El duro recuerdo de las consecuencias que tuvo para Japón su ambición militar en la Segunda Guerra Mundial, con la derrota y los horrores en Hiroshima y Nagasaki, hizo que por décadas perdurara una aversión al poderío militar.
Pero en el contexto actual Japón ya no puede permitirse eso, y así lo entienden sus líderes”, explica Tetsuo Murata, especialista en estudios de seguridad de la Universidad Hosei, quien señala que además de China, los otros factores que impulsan esta transformación son las amenazas que se perciben desde “Corea del Norte y su programa nuclear, y Rusia que coopera cada vez más con ambos.
Las armas nucleares ofenden nuestra humanidad compartida y también traicionan la dignidad de la creación, cuya armonía estamos llamados a salvaguardar”.. La nación pasa por una transformación de sus fuerzas de defensa ante las acciones de países como China, Corea del Norte y Rusia, aun cuando mantiene una postura de décadas contraria a la guerra. Conmemora hoy el 80° aniversario de los ataques a Hiroshima y Nagasaki: JAPÓN HA INCREMENTADO sus capacidades defensivas en tierra aire y mar en los últimos años.